sábado, 26 de marzo de 2016

Beethoven, 189 años desde su muerte

Tumba original de BeethovenTumba original de Beethoven

Tal día como hoy, 26 de marzo, fallecía en 1827 uno de los artistas mayores de la Humanidad, Ludwig van Beethoven, el hombre cuya expresividad arrolladora abrió cauces nuevos a la música occidental, revolucionando especialmente la sinfonía, el cuarteto de cuerdas y la literatura para piano.

Recordemos su memoria con la Marcha Fúnebre que el maestro incluyó en su Música Incidental «Eleonore Prochaska» (para solistas, coro y orquesta, WoO 96). La pieza es el cuarto número (y final) de esta creación ocasional, y consiste en un arreglo para orquesta completa de la marcha fúnebre de la Sonata para Piano nº 12 en La bemol mayor, Op. 26, que en esta ocasión Beethoven transporta a la tonalidad de Si menor (es decir, un tono y medio más arriba que el original).

lunes, 7 de marzo de 2016

Se Cierra Una Época: R.I.P. NIKOLAUS HARNONCOURT

El sábado 5 de marzo falleció el gran maestro austríaco Nikolaus Harnoncourt, rodeado por su familia. ¡Vaya una pérdida! Se había retirado de la vida pública nada más el pasado mes de diciembre, con 86 años y la salud mermada por la enfermedad. En ese momento adjuntó una nota manuscrita a la audiencia de ese concierto final, en que dirigió al Concentus Musicus de Viena, formación legendaria fundada por él mismo junto a su esposa en 1953. Pero cuando Harnoncourt escribió ese mensaje de despedida, disfrutaba ya un estatus de primacía indiscutible, desbordando su nicho pionero de la música con expresión de época —el maestro austríaco no perseguía tanto la comunicación de un sonido, sino de una expresión— para abordar el repertorio clásico-romántico al mando de orquestas emblemáticas como la del Concertgebouw de Amsterdam, la Orquesta de Cámara Europea, la Filarmónica de Berlín o su homónima de Viena. No siempre su visión fue bien recibida, y su ideal estético dividió aguas a favor y en contra; pero esa conmoción fue signo de su grandeza, y por cierto muy beneficiosa en un arte como la interpretación musical, donde las convenciones se acumulan y arriesgan volverse un lastre. Cuestionar tales convenciones a fin de redescubrir el significado de las obras fue una hazaña de Harnoncourt y de toda una generación que marcó época y se despide ahora con él.

De mi parte lo guardaré entre los intérpretes más queridos, por mucho que haya enfoques suyos que a veces no me gustaran tanto (como algunas de las sinfonías beethovenianas). Pero jamás me dejó indiferente.

Larga vida a la memoria de Nikolaus Harnoncourt.

 
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